jueves, 23 de marzo de 2017

LAMENTO MI AUSENCIA

Hacía tanto tiempo que no escribía que no se ni cómo comenzar esta entrada. Ha sido una ausencia muy larga...casi cinco meses, y lo lamento.

Tras mi segundo aborto todo se volvió negro. Lo pasamos francamente mal, con días más malos y días menos malos, pero sin apenas poder levantar la cabeza. Decidí, o más bien me di cuenta de que necesitaba alejarme de todo este mundo, resetarme interiormente y aprender a vivir sin esta obsesión en la que se había convertido quedarme embarazada. Así es como dejé de lado el blog, y todo aquello que me recordaba a este mundo.

Por supuesto Cuquipapá ha estado siempre ahí, aunque no voy a negar que la frustración nos ha llevado a más de una discusión. Desde luego como pareja tampoco ha sido uno de nuestros mejores momentos e incluso pienso que no sé que habría sido de nosotros si no tuviésemos a nuestra Cuqui.

En medio de toda esta tormenta, las revisiones de rigor tras el aborto fueron bien, debíamos esperar un ciclo y podíamos volver a intentarlo. El problema es que habíamos perdido la ilusión

Pasó el primer ciclo y llegaron las Navidades. No voy a decir que dejáramos de intentarlo porque mentiría. No utilizábamos protección, aunque en ningún momento calculamos fechas ni utilicé test de ovulación ni temperatura basal ni absolutamente nada. Además, dada la situación y el momento que estábamos atravesando como pareja sinceramente nuestras relaciones eran bastante esporádicas.

Y así fue como el 23 de diciembre de 2016, víspera de Noche Buena, llegó la última regla que he tenido hasta la fecha.

Porque sí, ESTOY EMBARAZADA. Por extraño que parezca, y aunque todavía me cueste creerlo, me quedé embarazada dos ciclos después del aborto.

Estoy ahora mismo de casi 13 semanas. Hace un par de días fuimos a la ecografía del primer trimestre y todo parece ir bien y aún así, me cuesta creerlo todavía.

Y así es como la vida me ha vuelto a demostrar que cuando menos piensas, las cosas suceden

Sucedió en mi anterior embarazo, cuando tras 13 meses de intensa búsqueda ya dábamos por hecho que terminaríamos en una clínica de fertilidad (de hecho, hasta llegamos a realizar la primera visita). Y nos ha sucedido ahora cuando, únicamente dos ciclos tras el aborto y contra todo pronóstico lo hemos logrado de nuevo.

No voy a negar que estoy aterrada, aunque menos que durante las primeras semanas, que fueron una especie de infierno obsesivo-compulsivo. El ver a nuestro pequeñ@ en la ecografía de las 12 semanas nos trajo algo de paz y confianza en que esta vez sí, a la tercera, vaya la vencida.




jueves, 3 de noviembre de 2016

ABORTO ESPONTÁNEO

Ayer terminaba el plazo que me había dado la ginecóloga para que se desencadenara el aborto de forma natural.

Efectivamente no ha hecho falta que acudiera a la visita. El sábado por la noche comencé a manchar. Sinceramente lo que sentí en ese momento fue cierto alivio de que por lo menos mi cuerpo iba a ser capaz de hacer todo el trabajo y no necesitaría ni de pastillas ni de un legrado. 

En cuanto fui al baño y al limpiarme vi la mancha rosada en el papel, pensé en el susto que me hubiera llevado si no llego a estar sobreaviso. Al fin y al cabo si no hubiese ido a urgencias una semana antes yo estaría tan contenta pensando que el embarazo iba bién.

Durante todo el domingo estuve manchando (bastante menos de lo que sería una regla normal) y ya el lunes el sangrado se disparó. Utilizando compresas de alta absorción tenía que cambiarme cada hora (menos mal que tenía puente y estaba en casa)...el dolor era también muy intenso...hasta que a última hora de la tarde noté perfectamente cómo expulsaba un coágulo más grande de lo normal. Fuí corriendo al baño y efectivamente ahí estaba el pequeño saquito. Lo cogí con la mano y lo lavé bajo el grifo. Era de color gris y estaba roto, sin rastro de embrión. Supongo que nunca llegó a formarse, y de hecho agradezco no haberlo visto. Hubiera sido demasiado doloroso.

A partir de ahí he seguido manchando más o menos de forma parecida a una regla, sin grandes dolores, aunque con mucha pena. A ratos me siento hundida, y a ratos esperanzada en volverlo a conseguir. Imagino que con el paso de los días los buenos ratos irán superando a los malos.

Si todo sigue así, volveré a la ginecóloga el próximo lunes, para que me realicen una ecografía y confirmen que se ha expulsado todo correctamente. 

Y a partir de ahí la verdad es que no lo se. Por un lado nos morimos de ganas de volverlo a intentar cuanto antes, pero por otro...tenemos tanto miedo de que cuelva a ocurrir...Son ya dos veces, con un año de búsqueda de por medio! Tardaré tanto en quedarme la próxima vez? Cómo seré capaz de volverme a ilusionar? Estamos preparados?

Aunque tengamos muchísimas ganas de ser padres de nuevo me parece que ahora mismo necesitamos un paréntesis, descansar y digerir todas las sensaciones y sentimientos que estamos experimentando estos días.

Qué duro se nos está haciendo este camino....con lo fácil que fue con la Cuqui...parece que esta vez la vida quiere mostrarnos la otra cara de la moneda...




miércoles, 26 de octubre de 2016

MALDITO OCTUBRE

Se acabó el sueño. Qué poquito ha durado.

El lunes por la tarde repetimos la beta. Había subido pero poco. En las primeras semanas de embarazo la beta debe duplicarse cada 48-72 horas y la mía era de 811...cuando el sábado era de 721. Al abrir el sobre con el resultado se nos cayó el mundo al suelo. 

Luego la ecografía. Podía apreciarse perfectamente el saco gestacional de 5 mm bien implantado en el útero. Había crecido respecto al sábado, cuando medía únicamente 3 mm, aunque no se apreciaba saco vitelino ni embrión.

Con estos datos la ginecóloga decidió repetir beta y ecografía en 48 horas, aunque ya nos avisó de que la cosa no pintaba muy bien. De todos modos, al haber crecido tanto la beta como el saco, todavía teníamos un rayito de esperanza. Como nos dijo, en medicina 1 + 1 no siempre son 2 y existía un porcentaje (en torno al 10%) de embarazos evolutivos en los que la beta no duplicaba siguiendo el patrón habitual.

Así que hoy tocaba repetir el proceso. Esta vez primero ha sido la ecografía. Ahí estaba mi saquito, que había crecido hasta los 6,5 mm. No se apreciaba embrión, aunque nos han dicho que todavía era muy pronto para que se viera. Que el saco continuara creciendo nos ha dado esperanzas, pero se han desvanecido en cuanto nos han dado el resultado de la beta...781. Más baja que 48 horas antes.

Definitivamente este embarazo no va a tirar hacia adelante. Me han dado una semana de plazo para ver si mi cuerpo lo expulsa de forma natural. Si no es así, el próximo miércoles nueva beta y ecografía y ya pensaríamos en un legrado o en un aborto farmacológico.

Y así es como acaba todo. Maldito octubre, que me ha quitado ya dos embarazos

Ahora lo único que espero es que por lo menos lo expulse por mi misma y que termine pronto la pesadilla. Soy incapaz de describir la tristeza que sentimos en estos momentos.

El único consuelo que nos queda es que por lo menos, aunque sea fugazmente, lo hemos conseguido. Tras un año de intentos, este embarazo nos da la esperanza de volver a lograrlo. Aunque eso será más adelante. 

Ahora necesitamos recuperarnos del golpe y sanar las heridas, y eso solo será posible cuando todo esto acabe.





domingo, 23 de octubre de 2016

GESTACIÓN INCIPIENTE vs EMBARAZO ECTÓPICO

Como era imposible que Cuquipapá y yo fuéramos tan afortunados, comienzan los problemas...

Ayer sábado por la tarde comencé a sentir algo de dolor en la zona del bajo vientre. No eran los típicos dolores menstruales que pueden ser tan habituales al inicio del embarazo, más bien eran calambres y localizados principalmente en la zona izquierda. Al principio no le di mayor importancia, pero la molestia fue a más...hasta que llegó un punto en que no podía caminar derecha.

Lógicamente nos asustamos mucho. El ovario izquierdo es mi ovario "malo", donde tengo el endometrioma...así que a las nueve de la noche y tras dejar a la Cuqui con mi madre nos fuimos para urgencias.

De camino al hospital el dolor fue disminuyendo considerablemente hasta que cuando llegamos allí ya prácticamente había desaparecido. Llegué incluso a sentirme una loca paranoica y hasta dudé si había sido una buena idea montar tanto escándalo. Pero claro, una vez allí, lo mejor es que me miraran a ver qué se cocía por ahí dentro...

Enseguida me hicieron desvestirme de cintura para abajo para practicar una ecografía vaginal. La ginecóloga me preguntó la fecha de mi última regla, según la cual estaría embarazada de 5+4 semanas (aunque según mis cálculos estaría de un poquito menos, 5+2). Introdujo el aparato y Cuquipapá y yo contuvimos la respiración. Tras mirar y mirar desde todos los ángulos posibles durante lo que nos pareció una eternidad, por fin nos dijo que ella no veía nada, ni en el útero ni fuera de él. El endometrio engrosado compatible con embarazo pero sin rastro del saco gestacional.

En ese momento entré en pánico...era posible no ver nada a esas alturas? Me contestó que tendríamos que hacer una analítica para determinar el nivel de beta Hcg en sangre, que podía ser que estuviera de menos tiempo del que pensaba. De todos modos, prefirió llamar a dos colegas más para que me valoraran y estar más segura.

Acabé rodeada de 4 ginecólogas rebuscando dentro de mi útero, trompas y ovarios hasta que dos de ellas dijeron creer haber visto lo que podía parecer un pequeño saco. Apenas una manchita negra que aparecía y desaparecía a la mínima que movían ligeramente el ecógrafo. Nos confirmaron que con  la ecografía no podían llegar a ninguna conclusión...no tenían claro que se viera el saco y no aparecían rastros de embarazo ectópico.

Me hicieron la analítica para confirmar el valor de la beta en sangre. En apenas una hora nos dieron el resultado: 721,54 mUI/L. Según sus valores de referencia muy bajo para mis semanas de gestación.

La ginecóloga nos explicó que habían tres opciones:

1.- Que estuviera embarazada de menos semanas. Yo esta opción la descarto, ya que se perfectamente cuándo ovulé.

2.- Que se trate de un embarazo no evolutivo. Es decir, que se esté parando, si es que no lo ha hecho ya.

3.- Que se trate de un embarazo ectópico.

Descartando la primera opción, las otras dos no son muy alentadoras...ahora toca volver mañana, cuando habrán pasado 48 horas para repetir beta y ecografía. Salimos de allí destrozados.

No me puedo creer que después de tanto tiempo, tantas decepciones...esto vaya a acabar así.

Hoy me he repetido un Test de Embarazo, que se ha marcado más que el anterior. Llevo horas y horas enganchada al ordenador revisando cientos de tablas con valores normales de Hcg y en la gran mayoría me encuentro dentro del rango, por el límite bajo eso sí, pero dentro al fin y al cabo.

A ratos soy optimista, y estoy convencida de que todo saldrá bien...y al momento me hundo en un pozo negro y no puedo más que llorar. Solo queda esperar a mañana. Estamos aterrados pero por lo menos saldremos de dudas, la incertidumbre es lo peor.




lunes, 17 de octubre de 2016

MI TERCER EMBARAZO

Mi primer embarazo llegó pronto, sin contratiempos, un embarazo muy bueno y tranquilo que nos trajo lo que más queremos en este mundo, a nuestra Cuqui.

Mi segundo embarazo llegó también muy pronto, aunque con la misma rapidez con la que llegó se esfumó...dejándonos hundidos aunque con la esperanza de que lo volveríamos a conseguir. Si lo habíamos logrado tan rápido en dos ocasiones...por qué no iba a ser así de nuevo?

Y ahora, 13 meses después, por fin llega mi tercer embarazo. Cuando estábamos comenzando a asimilar que nos dirigíamos irremediablemente hacia un tratamiento de fertilidad, después de aceptar que sería complicado lograrlo de manera natural. Cuando ya estábamos visitando clínicas, valorando tratamientos, precios...ahora, cuando menos lo esperábamos, llega.

Porque la vida es así, tiene estas cosas. Meses y meses atenta a los Test de Ovulación, a la semana fértil, a la gráfica de temperatura, haciendo los deberes aplicadamente...y el mes por el que menos hubiera apostado...resulta ser el bueno.

Todavía nos cuesta creérnoslo. Ya no tengo la inocencia que tenía en mis dos primeros embarazos. Ahora soy consciente de que estar embarazada no garantiza que vaya a tener un bebé. Queda mucho camino por recorrer aunque con lo que nos ha costado llegar hasta aquí...ya doy gracias una y mil veces.

Andamos estos días entre la felicidad más absoluta y el miedo más aterrador. No se cuántos Test de Embarazo me habré hecho para confirmar que los niveles de hormona HCG van aumentando como deben.

Hoy sería mi día 18 DPO. La temperatura sigue alta, los primeros síntomas van apareciendo y el Test de Embarazo Clear Blue ha pasado de decir "Embarazada 1-2" a "Embarazada 2-3" así que, en principio, todo parece ir bien.



Por fin me he atrevido a pedir cita con mi ginecóloga para la primera ecografía a las 8 semanas y con la matrona de la Seguridad Social. Recuerdo lo duro que se me hizo tener que cancelarlas tras perder mi segundo embarazo...

Toca esperar a mediados de noviembre. Se hará larga la espera, pero la afrontamos confiados. 

Esta vez ha de salir bien, ha de ser la buena. Han sido muchos meses, muchas decepciones, muchos lloros tras ver aparecer la regla puntual mes tras mes, al conocer embarazos de amigas y conocidas, tensiones con Cuquipapá, discusiones...en fin, desde luego que hay que vivirlo para saber lo que es.

Recuerdo que tras el aborto, Cuquipapá y yo decíamos...."nos da igual lo que tarde en llegar, pero que la próxima vez sea para quedarse". Desde luego que no pensábamos que tardaría tanto pero...tenemos fe en que la larga espera merecerá la pena.


miércoles, 12 de octubre de 2016

Y CUANDO MENOS PIENSAS...SALE EL SOL

Ha pasado tiempo desde mi última publicación. Es fácil imaginar cómo terminó todo....un nuevo batacazo, muy muy fuerte...impotencia, desesperación...sin ganas de hablar y mucho menos escribir sobre el tema...

Cuando conseguimos reponernos un poco, pedimos cita en una clínica de fertlidad, a la que fuimos hace dos semanas. Este viernes teníamos cita en otra clínica, pero me parece que la voy a tener que anular porque....cuando menos piensas....sale el sol.


martes, 6 de septiembre de 2016

ESTOY DE VUELTA

Últimamente tengo el blog olvidado. Han sido unas semanas de "desconexión" que nos han sentado de maravilla.....y aunque con Cuquipapá apenas hemos podido coincidir una semana de vacaciones, la hemos disfrutado a tope!!

La Cuqui ha disfrutado como nunca entre días de playa, tardes en la piscina en casa de sus abuelos y juegos interminables con sus primos y primas...y sigue haciéndolo apurando los pocos días que faltan para que empiece el colegio, como dice ella: el cole de grandes!!

Así que andamos estos días muy entretenidos preparando todo lo necesario para la vuelta al cole. El próximo lunes es el gran día...aunque la primera semana es de "adaptación", así que asistirá únicamente un par de horas y acompañada por mí los dos primeros días. No creo que tengamos mayores problemas....su adaptación a la guardería fue inmejorable...ni un solo lloro o mala cara en todo el curso...pero bueno, no puedo evitar un cierto gusanito en el estómago deseando que se encuentre a gusto con su profesora y sus compañeros.


Y qué hay de nuevo en el tema de la búsqueda? básicamente nada. Desde mi última entrada un nuevo intento fallido y poco más. 

Me encuentro en este momento en el día 7 DPO y cruzando los dedos para que esta vez sea la buena. Debo reconocer que hacía ya algún tiempo que perdí la esperanza. Desde antes casi de empezar cada ciclo estaba convencida de que no lo íbamos a lograr...pero esta vez es distinto....estoy notando cosas muy distintas a los meses anteriores y no puedo evitar pensar que quizás sí, que tal vez esta vez lo hayamos conseguido...aunque enseguida intento echar el freno porque se que es muy muy pronto y que luego la caída será mucho peor.

El caso es que este mes, en un derroche de energía y ganas por conseguir nuestro tan y tan ansiado embarazo creo que ha sido cuando más papeletas hemos jugado...en otras palabras...que Cuquipapá ha estado especialmente fogoso e insistente así que podríamos decir que es la vez que hemos hecho mejor los deberes sin duda.

Por otro lado, el domingo, el que sería día 5 DPO me desperté con una bajada de la temperatura basal bastante acusada y unos calambres en la zona de los ovarios muy intensos. Los sentía como si me fuera a venir la regla en ese mismo instante (lo que sabía que era imposible tan solo 5 días después de haber ovulado). Al ir al baño, al limpiarme, vi un poquito de sangre en el papel. Muy poca cosa...apenas una manchita rosada. 

Y desde entonces, aunque la temperatura remontó de nuevo, continúo con la misma sensación de que en cualquier momento va a aparecer la regla, con los mismos dolores y molestias pero a día 7 DPO, cosa que no me había pasado antes.

Soy consciente de que es muy pronto. Y que incluso aunque mis síntomas sean consecuencia de una supuesta implantación, hay muchas cosas que se pueden torcer todavía. Pero tras tantos meses de búsqueda me siento ilusionada, necesito volver a sentirme así.

Estamos quemando los últimos cartuchos antes de iniciar la vía de los tratamientos. Ojalá sea de esas que pueden decir..."cuando ya nos relajamos porque dábamos por seguro que sin ayuda no nos quedaríamos...ZAS!...lo conseguimos!!"