jueves, 31 de diciembre de 2015

ADIÓS 2015...HOLA 2016

Qué poquito le queda a este 2015...en apenas unas horas nos despediremos definitivamente de él y daremos la bienvenida al nuevo año.

Este fin de año va a ser un poco descafeinado...cuquipapá trabaja, y a mí no me apetecía nada ir a ningún sitio sola con la cuqui, así que nos hemos quedado en casa. De hecho ella ahora mismo ya duerme...y yo, con el sueño que voy arrastrando (llevo tres noches muy malas con el resfriado de la peque) ni siquiera sé si aguantaré hasta las uvas!

De todos modos, aguante o no, no quiero dejar pasar la oportunidad de redactar mi lista de propósitos para el nuevo año. Espero llegar a finales de 2016 con todos, o por lo menos la mayoría, cumplidos.

Aquí está mi lista;

1) Ser más paciente y jugar más con la cuqui. A veces tengo la sensación de que preocupo más por las tareas de la casa que por pasar tiempo con ella. También pierdo los nervios con demasiada facilidad. Quiero cambiar eso.

2) Encontrar más momentos para cuquipapá. En la vorágine del día a día, olvido buscar el momento de parar, mirarle a los ojos, y decirle lo mucho que le quiero y lo afortunada que soy de tenerle conmigo y de que sea el padre de mi hija.

3) Jugar más con Socio (nuestro bulldog francés). Antes solíamos llevarle al parque más a menudo para que corriera, pero he de reconocer que con la llegada de la peque ya apenas salimos a jugar (más allá de los tres paseos diarios, eso sí!).

4) Cuidar más mi alimentación. Intento comer bien, y creo que más o menos lo consigo, pero hay ciertos alimentos que me pierden como las patatas fritas de bolsa, chocolate, mayonesa...de los que abuso mayoritariamente en la cena que, por los horarios de cuquipapá, suelo hacer sola.

5) Continuar con el blog y hacerlo  crecer día a día.

6) Iniciarme en el mundo de la fotografía. Siempre me ha llamado mucho la atención y me parece que este año los Reyes Magos me traerán mi primera cámara reflex (será que he sido muy buena!).

7) Encontrar tiempo para mí y mimarme un poquito más. La peluquería la piso una vez al año y nunca encuentro el momento de hacerme la manicura o las cejas como Dios manda!

8) Quedar más con mis amigos.

9) Rendir más en el trabajo. Ojo! que no es que no rinda, y me consta que mis jefes están muy contentos conmigo, pero soy una persona muy exigente y siempre creo que las cosas se pueden mejorar. Desde que nació la cuqui y reduje jornada siento que constantemente voy con la lengua fuera para llegar a tiempo a todo. Creo que la clave está en organizarme mejor, espero conseguirlo.

10) Quiero ser de nuevo mamá.

Sin más, únicamente me queda desearos a tod@s un muy Feliz Año Nuevo. Que 2016 se lleve todo lo negativo y os traiga todo aquello que anheláis. 

Un beso fuerte y nos vemos el año que viene!

lunes, 28 de diciembre de 2015

VUELTA A LA RUTINA Y A LA BÚSQUEDA

Bueno, cómo han ido las Fiestas?? Nosotros tras tres días de locura absoluta por fin hemos vuelto a la "normalidad". Han sido tres largos días de celebración: Nochebuena, Navidad y San Esteban...mucho ajetreo para todos, pero sobretodo para los más pequeños.

La cuqui estos días ha ido de más a menos...tres días sin siesta y prácticamente sin probar bocado. Y no es que ella sea mala comedora eh? pero con tanto movimiento y esas comidas que se salen de lo que ella está acostumbrada...al final se ha hecho duro...ha estado especialmente irritable, pidiendo brazos todo el día y despertándose por las noches. A todo esto se le ha unido un catarro bastante molesto. Hoy ya ha estado un poquito mejor...parece que la vuelta a la rutina le está sentando bien, a ella y a nosotros :)

Por otro lado estos días me han hecho desconectar bastante de la búsqueda...prueba de ello es que incluso algunos días se me ha pasado tomarme la temperatura basal! También se me terminó hace días el Agnus Castus y tras preguntar en un par de herboristerías y no encontrarlo desistí y ya no lo estoy tomando.

El viernes comencé con los Test de Ovulación aunque por el momento todos han salido negativos. Suelo ovular el día 19-20 del ciclo, así que estando hoy a día 17 no creo que tarde mucho en aparecer el positivo, aunque la duración de mis ciclos es tan irregular que nunca se sabe...de todos modos esta no es la mejor semana, porque cuquipapá trabaja por la noche así que las oportunidades de estar solos con la cuqui durmiendo se reducen drásticamente. ...menos mal que yo estoy de vacaciones y podremos aprovechar alguna "siesta" para ver si encargamos de una vez por todas al hermanit@, a ver cómo se nos da...

Sinceramente no tengo puestas muchas esperanzas este mes, tanto es así que me programé una pequeña intervención (nada grave, quitar un par de quistes de grasa) para finales de enero, convencida de que no estaré embarazada. Y de verdad lo pienso. Comencé esta búsqueda segura de que me quedaría rápido pero poco a poco me he ido "enfriando" y ahora, con cada nuevo intento veo las cosas más negras. Espero equivocarme...

Noto que respecto a este tema me siento muy baja de ánimo...se me está haciendo largo y cuesta arriba...y soy consciente que cuatro meses no son nada!! y que incluso puedo molestar a alguien que lleve intentándolo más tiempo que yo, pero no puedo evitar sentirme como me siento.

La cuqui vino tan pronto que pensé que enseguida lo lograríamos, que esto era coser y cantar...que ilusa...tampoco ayuda estar rodeada de embarazos, además de esos conseguidos a la primera y casi sin querer...

Y la puntilla ha sido la frase estrella de estos días de reuniones familiares: "y vosotros qué, para cuando el segundo? no os animáis??" para la que tenemos ya la respuesta estándar "uy, la cuqui todavía nos da mucha guerra...más adelante..." y parece que así se quedan tranquilos...

















jueves, 24 de diciembre de 2015

LA NAVIDAD CON NIÑOS

Siempre me ha gustado la Navidad. Pertenezco a una familia numerosa, somos cuatro hermanos y tenemos muchos primos y tíos con los que afortunadamente nunca hemos perdido el contacto, y estos días son la ocasión ideal para reunirnos y disfrutar de unas buenas comilonas en familia.

Recuerdo con mucho cariño esas Noche Buenas en casa de mis abuelos, donde tras la cena, mi abuelo sacaba grandes cajas llenas de panderetas y zambombas. Mi tío siempre llevaba una guitarra, y nos daban las cuatro o las cinco de la mañana cantando y bailando. 

La comida de Navidad en casa de mis otros abuelos, con tantos a la mesa que no cabía un alfiler entre uno y otro, y con esas sobremesas eternas.

San Esteban en casa. Venían los abuelos a comer y por la tarde se unían tíos y primos...qué alegría la casa llena de gente, y mis hermanos y yo correteando arriba y abajo jugando con nuestros primos.

Con los años las cosas cambiaron. Quien más quien menos teníamos nuestras parejas y otros compromisos y obligaciones. Faltó mi abuelo Joaquín, y aunque tengo la fortuna de tener a mis otros tres abuelos, se iban haciendo mayores y lógicamente no aguantaban el trote de hace años.

Pero todo cambia con la llegada de los hijos. Desde que llegó la cuqui vivimos estas Fiestas con una ilusión renovada. Llevamos semanas enseñándole villancicos y poniendo música navideña en casa. Cuquipapá y yo, que desde que nos fuimos a vivir juntos jamás nos habíamos preocupado de decorar la casa, hace dos años que nos esmeramos con los adornos navideños y el árbol de Navidad.

Este ha sido el primer año que la cuqui ha colaborado en la decoración, ayudándonos a poner las bolas al árbol (en la medida de sus posibilidades!). Ese día, mientras sonaba de fondo el disco "Christmas" de Michael Bublé (que me encanta y sin duda alguna os recomiendo) y veía a la cuqui coger las bolas de la caja para colgarlas ilusionada en el árbol de Navidad, no pude evitar emocionarme y que se me llenaran los ojos de lágrimas. Al mirar a cuquipapá vi que le pasaba exactamente lo mismo, sus ojos brillantes le delataban.

Sin duda estas Navidades van a ser muy especiales, la cuqui crece y se va dando cuenta de más cosas. Me encantaría que año tras año, en su memoria se fuera forjando un recuerdo de estas fechas tan especial como el que tengo yo, y para eso vamos a trabajar cuquipapá y yo.

Esta noche tenemos una fiesta. Continuamos reuniéndonos en casa de mi abuela, y aunque falte mi abuelo, ahí estarán mis padres, mis tíos, mis hermanos y primos con sus hijos. De nuevo una casa llena de niños, gritos, risas y canciones. En definitiva, llena de alegría.

Sin más, me gustaría desearos a tod@s una FELIZ NAVIDAD, que podáis disfrutarla con vuestros seres queridos y que paséis estos días rodeados de alegría, risas y felicidad.



miércoles, 23 de diciembre de 2015

EL PARTO DE LA CUQUI - Nuestro final feliz

Pues sí, casi 48 horas después de notar las primeras contracciones, parece que por fin la cosa llega a su fin. Estoy en dilatación completa y la cuqui empuja con fuerza para salir.

Cuando regresa la matrona lo hace con la ginecóloga y varias personas más. No se molestan en presentarse y a decir verdad yo tampoco pregunto. 

La matrona me explica lo que he de hacer. Con cada contracción, cuando ella me avise (ya que con la epidural no las veo venir) he de empujar con todas mis fuerzas. Y así comenzamos...cada vez que me lo indican yo empujo ayudada por cuquipapá, que me aguanta la cabeza. En ese momento me doy cuenta de lo agotada que estoy....tantas horas de parto se hacen notar, y siento que me falta el aliento. 

Empujo una vez, dos, tres veces...mientras cuquipapá me susurra que lo estoy haciendo muy bien, que soy una campeona, la matrona solo hace que decirme "más fuerte!! más fuerte!! Así no hacemos nada!!...me aprieta la barriga,  según dice ella, para ayudarme...le pido que pare, que me está haciendo daño...continuo empujando...la ginecóloga nos avisa de que ya está viendo a la niña, y le dice a cuquipapá si quiere verla. Él se lo piensa, es muy impresionable, pero se sitúa al lado de la ginecóloga para ver cómo asoma nuestra pequeña al mundo. Le noto emocionado.

La ginecóloga me dice que va a utilizar una ventosa obstétrica para ayudar a la pequeña a salir. Yo no entiendo nada...si llevo muy poco tiempo empujando!...por qué es necesario utilizar nada? Pero no reacciono, no soy capaz de decir nada, y con esa ventosa, en un par de pujos más mi pequeña llega al mundo.

La colocan enseguida encima de mí. Llora inconsolable, yo la abrazo, me parece todo tan irreal...soy mamá...por fin tengo a mi hija en brazos, lloro...cuquipapá llora también. Nos miramos, nos besamos...jamás fuimos más felices...estamos viviendo un sueño.

La matrona me devuelve a la realidad...me tienen que coser, así que le dan la pequeña a cuquipapá para evitar que me mueva mientras me cosen. Tres puntos de episiotomía y un desgarro interno. Tardan mucho, tanto que comienzo a sentir dolor. Les aviso para que me pongan un poco más de anestesia. Me pinchan anestesia local. Yo miro a cuquipapá con su hija en brazos. está totalmente hipnotizado...no hace más que repetir "qué guapa, qué guapa"...

Por fin terminan y cuquipapá me devuelve a mi pequeña. Le digo a la matrona que quiero darle el pecho, pero me dice que ahora enseguida me van a subir a la habitación, así que mejor me espere para que  no nos interrumpan...yo tengo entendido que cuanto antes mejor...pero hago caso y me espero...al cabo de tres cuartos de hora seguimos allí. Entra otra matrona a recoger material y le explico que quiero comenzar a darle el pecho. Me mira extrañada y me dice "pues tu misma, sácate la teta y dale"...la verdad es que no se por qué me sigue sorprendiendo la "amabilidad" de todo el personal...

Hago lo que me dice y siguiendo mi instinto, ya que no recibo ningún tipo de ayuda ni consejo, acerco a la pequeña al pecho. Es increíble cómo siendo tan y tan pequeña sabe exactamente lo que ha de hacer. Se engancha a la perfección y así, unidas, vienen a buscarnos y nos suben a la habitación.

Desde luego no fue el parto soñado...prácticamente nada salió tal y como lo había planeado, y con el tiempo tengo la sensación de que que me dejé hacer y me callé demasiadas cosas, asistiendo como mera espectadora al parto de mi hija. 

Pero de todo se aprende y esta experiencia me va a servir y mucho, de eso no tengo dudas.

EL PARTO DE LA CUQUI - Dilatación Parte 2

Me hacen pasar a una sala muy amplia con una cama en el centro. Ahí nacerá la cuqui. Me pongo la bata que me dan y me estiro en la cama. Entran la ginecóloga que me ha hecho el tacto y la matrona. La ginecóloga es muy joven, la matrona es más mayor. Ninguna de las dos parece especialmente amable.

La matrona me pregunta si he traído todos los papeles, se refiere a la última analítica, el electro y el Plan de Parto

El Plan de Parto es un documento donde se plasman nuestras preferencias a la hora de dar a luz. Lo suele facilitar el mismo hospital en la recta final del embarazo y hay que llevarlo en el momento del parto. El personal está obligado a respetarlo, siempre y cuando las condiciones lo permitan. Por supuesto es un documento totalmente abierto y sujeto a todos los cambios que una quiera, incluso en el mismo momento del parto.

Una de las cosas que establecí en ese documento era mi intención de probar el parto sin epidural, aunque tenía claro que si no lo soportaba no tendría ningún problema en pedirla...no se trata de que te den ninguna medalla no?

Desde luego, tras más de 24 horas de contracciones y en el estado en que me encontraba, lo único que quería era que parara el dolor, así que le dije a la matrona que por favor obviara lo que había escrito en el Plan de Parto ya que quería que me pusieran la epidural. 

Matrona (M): Si es que...todas sois iguales...(risita sarcástica) todas venís con el cuento de parir sin epidural y al final todas la acabáis pidiendo...has ido a clases de preparación al parto?

Yo (Y):

M: Es que os comen la cabeza con ese rollito del parto natural. Pues ahora que ya ves como son las contracciones vuelves y les cuentas la verdad! (más risas con la ginecóloga).

No me podía creer lo que estaba viviendo, se estaban riendo de mí? 

Me ponen las correas para controlar las contracciones y me toman la tensión y la temperatura. Tengo fiebre. Me dicen que hay que acelerar el tema, la fiebre puede indicar algún tipo de infección. 

La ginecóloga decide romperme la bolsa. Me avisa de que será como un tacto pero algo más doloroso pero no me preocupa, no creo que se pueda sentir más dolor del que yo siento en ese momento. Al hacerlo noto un gran chorro de líquido caer entre mis piernas. Son aguas claras, buenas noticias.

Me ponen una vía con oxitocina para acelerar las contracciones y por fin llaman al anestesista. Nos dejan solos a cuquipapá a mí. Las contracciones ya son bestiales, el dolor me come, no consigo dominarlo y grito fuera de mí con cada nueva contracción. Por fin aparece la anestesista, la primera persona amable con la que me encuentro allí. Hacen salir a cuquipapá y me pide que me siente y curve la columna todo lo que pueda hacia dentro. La postura es muy incómoda, pero aprovechamos un momento de paz entre contracciones y consigue pincharme a la primera.

A los poco minutos comienza a hacer efecto y por fin encuentro algo de paz. Tras todo lo vivido hasta ese momento, el mero hecho de no sentir dolor hace que se abra el cielo ante mí. Aunque estoy agotada ahora ya puedo pensar con claridad y comienzo a ser consciente de que estamos a punto de conocer a nuestra pequeña...la vida nunca jamás volverá a ser igual.

Llegados a este punto, habrían pasado unas dos horas desde que llegamos al hospital. Yo estaba tranquilamente charlando con cuquipapá, viendo cómo el monitor que controlaba las contraccones echaba humo, aunque lógicamente yo no sentía nada. Y entonces comencé a notar una presión muy fuerte por ahí abajo, es dificil de describir...justo al poco entró la matrona y cuando se lo dije. me dijo que era normal, que no me preocupara, a lo que yo pregunté "no será la niña saliendo ya no?" Ella me miró con cara de "guasa" y me contestó que eso era imposible, que las cosas no iban tan rápidas.

Ante mi insistencia decidió ver qué estaba pasando por ahí abajo. Cuando miró entre mis piernas le cambió la cara, me miró diciendo "pues sí, vamos a empezar" y salió disparada de la sala llamando a la ginecóloga. Al parecer mi niña tenía prisa por salir y había comenzado el trabajo ella solita.









martes, 22 de diciembre de 2015

EL PARTO DE LA CUQUI - Dilatación Parte 1

Tras no parar durante todo el día, cuando por fin llegamos a casa y me senté a descansar comencé a notar contracciones mucho más dolorosas. Era un dolor que no había sentido hasta ese momento y noté además que las contracciones eran más regulares.

Empezamos a controlar el tiempo entre contracciones, pero todavía eran bastante espaciadas, cada 10-12 minutos. Intenté cenar algo, aunque no tenía mucha hambre, y nos dispusimos a dejar pasar el tiempo y que la cuqui y mi cuerpo hicieran su trabajo.

El tiempo entre contracción y contracción se fue acortando, mientras que la duración y la intensidad aumentaban. Cada vez eran más dolorosas, aunque por el momento me veía capaz de soportarlo. Al cabo de unas tres horas, cuando vimos que las contracciones eran cada 5-6 minutos, decidimos que era el momento de volver al hospital. Esta vez sí, con la bolsa preparada.

Una vez allí de nuevo el mismo proceso. Primero un tacto (bastante más doloroso que el anterior). Apenas 1 cm de dilatación!! Se me vino el mundo encima...de nuevo las correas...con contracciones más o menos regulares, pero muy "verde" todavía. Como no teníamos nada que hacer allí, nos mandaron para casa, diciéndonos que volviéramos cuando las contracciones fueran cada 4 minutos durante por lo menos 1 hora.

Intentamos dormir algo, pero era muy difícil. Nos estiramos en la cama cogidos de la mano. Cada vez que sentía que venía una contracción apretaba fuerte la mano de cuquipapá para que comenzara a cronometrar. Llegó un momento en que ya no soportaba estar estirada, así que sobre las 04:00 horas me levanté y comencé a caminar por la casa, aguantando como podía las contracciones...cada vez que venía una sentía como si me partieran en dos desde dentro...

Nada me aliviaba, ni controlar la respiración, ni la pelota de pilates, ni los masajes de cuquipapá...únicamente encontraba cierto alivio cuando me metía en la ducha y dirigía el chorro de agua caliente bien fuerte hacia la zona de los riñones.

A media mañana, y con contracciones cada 4 minutos decidimos volver al hospital, esta vez tenía que ser la buena. De nuevo lo mismo: tacto (muy muy doloroso)...dilatación de 1 cm...no había avanzado nada...yo hundida.....de nuevo correas...contracciones de alta intensidad pero de nuevo irregulares por lo que por lo visto no eran productivas. Ante nuestro asombro, nos mandan de nuevo para casa. 

De nuevo en casa cuquipapá intenta que coma algo...llevo prácticamente dos noches sin dormir y sin comer nada desde la cena del día anterior. Sólo consigo tomarme un zumo de naranja. Las contracciones empiezan a ser muy fuertes, siento que estoy llegando a mi límite y por primera vez me digo a mi misma que no seré capaz de hacerlo. Me siento muy débil, agotada, apenas tengo fuerzas para hablar. Con cada contracción me doblo fulminada y siento que me tiemblan las piernas.

Cuquipapá está preocupado. Insiste en que llevo demasiadas horas con contracciones, que me ve muy pálida y que deberíamos ir a la Clínica Dexeus, que allí seguro que no me envían a casa. Nos preocupa que tras tantas horas la cuqui pueda estar sufriendo. Además me encuentro muy débil ya, necesito que todo termine porque siento que acabaré desmayándome, así que accedo.

Cuquipapá tiene que ayudarme a subir al coche porque mis piernas prácticamente no me responden. De camino al hospital fijo la mirada en las luces de Navidad y siento que la cabeza a ratos se me va. Cuquipapá está muy preocupado. Cuando llegamos, tengo que ir aguantándome en las paredes hasta llegar a la entrada de urgencias.

Nos atiende una ginecóloga muy joven. De nuevo un tacto...más dolor...5 cm...biennnn!! Por fin una buena noticia! Comienzo a ver la luz al final del túnel.





EL PARTO DE LA CUQUI - Pródromos de Parto

Fue un parto largo, muy largo, y desde luego no fue tal y como lo había imaginado...pero ese momento en que te ponen a tu hija encima es tan inmenso y tan único, que solo deja lugar a la felicidad, borrando cualquier pensamiento o sensación negativa.

Durante el embarazo me había estado informando sobre el momento del parto. Para mí era muy importante tener un parto respetado, con la mínima intervención, e incluso estaba dispuesta a intentar un parto sin epidural, ya que quería ser plenamente consciente de la llegada de mi hija al mundo.

Aunque tengo un seguro privado, quería dar a luz en el hospital público que me per toca, ya que en Barcelona es de los que mejor fama tiene en cuanto a partos se refiere, así que yo estaba encantada. Tenía claro que pariría allí, aunque los controles los llevaba simultáneamente por la Seguridad Social y por el seguro privado en la Clínica Dexeus.

Mi FPP (Fecha Prevista de Parto) era el 26/12/2013, día de San Esteban y festivo en Cataluña. Mi familia bromeaba con que les iba a dar las Navidades.

La madrugada del 16 al 17 de diciembre me desperté a las 5:00 horas con muchas molestias...notaba lo que yo creía que eran contracciones, aunque como no había notado antes ninguna no estaba segura...me levanté y me senté en el sofá pensando que se me pasaría. Al ver que las contracciones no paraban, comencé a controlar la duración y el tiempo entre contracción y contracción. Las tenía cada 5-6 minutos, así que en cuanto cuquipapá se despertó nos fuimos para el hospital.

Estábamos muy tranquilos, yo estaba convencida de que era una falsa alarma...absolutamente todo el mundo me decía que seguro que se me retrasaba...siendo primeriza y con la barriga tan alta como la tenía...hasta mi ginecóloga (que me había visto 4 días antes) daba por hecho que hasta enero nada.

En el hospital me hicieron un tacto (bastante doloroso por cierto) y me dijeron que el cuello del útero estaba muy blandito, pero que no había dilatado nada. De ahí pasamos a las correas, donde comprobamos que efectivamente estaba teniendo contracciones aunque eran todavía muy irregulares (es cierto que desde que llegamos al hospital noté como la cosa se había frenado bastante). La matrona que me atendió, que era un amor, me dijo que que estaba en lo que se llaman pródromos de parto, que es cuando el cuerpo se está preparando para el momento del parto. Me aconsejó que caminara bastante para aligerar el tema y me aseguró que desde luego de esa semana no pasaba...

Cuquipapá y yo nos quedamos en shock...que se adelantara el parto era lo último que nos esperábamos...pero si ni tan siquiera tenía preparada la bolsa!! (lo sé, lo sé...falta total de previsión...). Así que nos fuimos para casa dispuestos a preparar todo para la llegada de la cuqui.

Durante el día estuvimos de allá para acá, haciendo compras de última hora. Continuaba sintiendo contracciones dolorosas de vez en cuando, pero eran muy irregulares. Y así estuvimos hasta la noche...ahí ya fue otra historia...comenzaba la fiesta...






viernes, 18 de diciembre de 2015

DOS AÑOS

Tal día como hoy, a las 22:38 horas del 18 de diciembre de hace exactamente dos años, íbamos camino del hospital. Atravesábamos en coche la Avenida Diagonal de Barcelona. Yo soportaba el dolor de las contracciones como podía mientras fijaba mi mirada en las luces de Navidad, intentando controlar la respiración. Papá cogía mi mano y me repetía lo bien que lo estaba haciendo, que ya faltaba poco y que tenía que ser fuerte.

Por fin llegamos al hospital, y tan solo tres horas más tarde, a las 01:55 horas del jueves 19 de diciembre de 2013 viniste al mundo, a nuestro mundo, y lo llenaste de luz.

Te quiero cuqui, te quiero mi vida, TE QUIERO SOFÍA.



EL VIRUS FANTASMA

Hoy vengo indignada otra vez. 

Quiero aclarar que mi estado natural no es de indignación. Me considero una persona bastante razonable, que se muerde la lengua demasiadas veces para evitar incomodar u ofender al de enfrente. 

El caso es que ayer fuimos con la cuqui al centro de Salud (aquí en Cataluña, el CAP) para la revisión de los dos años. Como siempre, primero la ve la enfermera, que anota la altura y el peso y te pregunta sobre sus hábitos, alimentación, etc. y después aparece la pediatra para hacerle el reconocimiento.

En cuanto le quité la ropa para que la enfermera la pesara y la midiera, vimos que le habían aparecido en la piel una especie de piquitos rojos. No llegaban en ningún caso a "granitos", eran simplemente como puntitos muy muy pequeños repartidos por todo el cuerpo excepto en la cara. Como la cuqui es de piel muy pero que muy delicada y cada dos por tres estamos con urticaria yo no le di mayor importancia, siendo además el estado general de la niña excelente. Para entendernos, que ella estaba estupenda.

La enfermera tampoco le dio importancia y me recomendó que utilizara para el baño un jabón especial para pieles atópicas y aceite de almendras dulces.

Y entonces entró la pediatra y la visita dio un giro de 180 grados...e aquí la conversación:

Pediatra (P): uy, esta niña tiene el cuerpo lleno de granitos.

Yo (Y): ya, se los acabamos de ver, aunque le pasa bastante, tiene la piel muy delicada. Seguro que en unas horas le desaparece...le ha pasado ya antes.

P: mmm, no creo, esto parece virico eh? ahora hay pasa del boca-mano-pie...tiene pinta de ser eso. Ha tenido fiebre?

Y: No.

P: Eso será porque estuvo con otitis y le diste ibuprofeno que ha podido enmascararla.

Y: No, únicamente le di Dalsy el primer día, después ya nada. 

P: Da igual, tiene toda la pinta.

Y: Pero no tendría que tener granitos en la boca y en las manos?

P: Bueno, hay niños que la pasan de forma muy leve. Nada de guardería hasta la semana que viene.

(Aquí cuquipapá y yo nos miramos con cara de no estar entendiendo nada)

Y: Y es contagioso? es que el sábado celebramos su cumpleaños.

P: Uy...pues lo tendréis que aplazar.

Y así, sin más, desapareció. Nuestras caras eran un poema. 

Cuando salimos de la consulta yo le iba dando vueltas al asunto...mi sobrina pasó hace no mucho el boca-mano-pie y para nada se parecían los granitos que tuvo ellas con los de la cuqui, eso sin mencionar que deberían concentrarse principalmente en la boca, las manos y el pie (de ahí el nombre) y la cuqui justamente tenía la boca y las manos totalmente limpias. Estuve buscando información y cada vez estaba más convencida de que no podía ser...si no cumplía ni un solo síntoma de la enfermedad!!

Al final le dije a cuquipapá, esta niña está bien, mañana va a la guardería y el sábado por supuesto que celebramos la fiesta! Él, que para estas cosas es más "prudente" no las tenía todas consigo...pero todas sus dudas se han disipado esta mañana en cuanto la hemos visto fresca como una rosa y sin una sola marca en su piel.

La verdad es que me dan ganas de llevársela otra vez a la pediatra para que la vea, pero como os he dicho, no es mi intención ir buscando bronca por ahí. Que yo entiendo que nadie es infalible, y todos nos equivocamos (yo la primera), pero es que esto era "blanco y en botella". Por más vueltas que le doy no se cómo pudo llegar a ese diagnóstico...

El caso es que a quien sí hice caso fue a la enfermera (un amor) y ya me he hecho con un gel de baño para pieles atópicas (por cierto, qué sablazo) y el aceite de almendras dulces que me recomendó. Esta noche lo estrenamos, a ver que tal.








jueves, 17 de diciembre de 2015

NO NOS ESTAMOS PASANDO UN POQUITO?

Ayer ocurrió una cosa que me indignó.

Cuando fui a buscar a la cuqui a la guardería, encontré una estampa preciosa. Quedaban seis niños en el aula, y la profesora los tenía la mar de entretenidos sentados a una mini-mesa jugando con plastilina. Se notaba que se lo estaban pasando pipa, tanto que la cuqui ni se levantó a saludarme, se limitó a sonreírme de oreja a oreja mostrándome orgullosa su obra de arte a medio hacer.

La vi tan contenta, tan en su salsa con las manos embadurnadas de plastilina junto a sus compañeros de clase, que quise sacar mi móvil para inmortalizar el momento. 

Rápidamente la profesora me alertó de que no estaba permitido sacar fotografías. Me explicó que en el momento de realizar la preinscripción hubo algunas familias que no dieron su consentimiento para que las fotografías de sus hijos salieran del centro.
La guardería puede fotografiar las actividades que realizan y en las que obviamente aparecen los alumnos, pero dichas imágenes no pueden salir fuera.

Es cierto que más o menos diariamente cuelgan fuera del aula algunas fotografías de lo que han hecho ese día, y yo pensaba que en algún momento nos las darían, pero se ve que no,

Y mi pregunta es...entonces nunca podré tener un recuerdo de mi hija en la guardería con sus compañeros de clase?? Porque unos pocos padres se nieguen a que las fotografías de sus hijos salgan del centro nos tenemos que fastidiar los demás?

No lo entiendo. Es un tema que quiero que me aclare bien la directora porque me niego a pensar que no podré tener ningún recuerdo de esta etapa tan importante en la vida de la cuqui. Me consta por lo que me ha comentado la profesora que varios padres ya se han quejado por lo mismo.

Porque digo yo...no es tan fácil como hacer que los hijos de los padres implicados no aparezcan en las fotografías? Se les aparta un momentito y listos. Pues se ve que no.

Yo puedo entender que unos padres no quieran que fotografías de sus hijos escapen de su control, pero por favor, que hablamos de imágenes de niños jugando en una guardería. Es más, hablamos de facilitar dichas imágenes al resto de padres, no de publicarlas al alcance de cualquiera.

Recuerdo que en la guardería donde fue mi sobrina no solo les enviaban por whatsapp fotografías cada día, sino que también videos divertidísimos de las actividades que realizaban. No sé si eso es lo normal o lo normal es lo que me pasa a mí!

Si alguien de casualidad llega hasta aquí y me lo puede aclarar, estaré agradecida!








martes, 15 de diciembre de 2015

EMBARAZO DE LA CUQUI

Esta semana, a escasos 4 días del segundo cumpleaños de la cuqui, me encuentro algo nostálgica. Me doy cuenta de que ya no es un bebé. Ahora es una personita que corre, baila, juega, canta y parlotea sin parar, cada vez más independiente.

Hoy, ordenando algunos papeles, he encontrado de casualidad una de las fotografías de la ecografía 4D que hicimos a las 28 semanas...y fijaos si estoy tontorrona que se me ha escapado alguna que otra lagrimilla...

A raíz del diagnóstico de la endometriosis, tenía un miedo atroz a no poder quedarme embarazada. Cada vez que pensaba en el tema, volvían a mi cabeza las palabras de uno de los ginecólogos de urgencias que me visitó por un episodio de dolor cuando me acababan de diagnosticar y estaba a la espera de la operación:

"Tú no eres consciente de lo que tienes no? esta enfermedad no tiene cura, y es posible que no puedas tener hijos"

Así, sin anestesia. Cuando escuché esas palabras no podía parar de llorar, menos mal que iba con mi madre, que no pudo reprimirse y le dijo cuatro cosas bien dichas a ese insensible. Cuando se lo expliqué a mi ginecóloga habitual, le quitó importancia y me dijo que no tenía porque ser así. Que ella no pensaba que fuera a tener problemas y que, en el caso de haberlos, era joven y podríamos ponerle solución. Eso sí, me recomendó no esperar mucho (en aquel entonces tenía 29 años).

Cuquipapá y yo nos casamos en junio de 2012, y decidimos ponernos manos a la obra a partir de enero de 2013, con 31 años recién cumplidos. Pedí hora con la ginecóloga para una revisión y por si me podía dar alguna indicación o consejo antes de iniciar la búsqueda. Me recomendó que dejara pasar un ciclo tras dejar la píldora, para que el cuerpo se pusiera "a punto" y me mandó ácido fólico (yodocefol). 

Ese mes de espera aprovechamos para dejar de fumar, ya que no quería tener que hacerlo una vez embarazada y ni si me pasaba por la cabeza continuar fumando durante el embarazo.

Y así llegamos a febrero. Primer intento con toda la ilusión del mundo y primer negativo....cómooooo???? debo reconocer que me sorprendió mucho. En mi inocencia pensaba que era tan fácil como dejar de tomar anticonceptivos y ya está. Pues se ve que no. Además, resonaban en mi cabeza las palabras del ginecólogo insensible...

Por aquel entonces dieron en televisión (creo recordar que en Documentos TV) un documental sobre la endometriosis. Mi madre y cuquipapá me advirtieron de que era mejor que no lo viera...y qué hice? Por supuesto correr a verlo. Fue impactante. El documental pintaba un panorama muy muy negro...varias mujeres explicaban su historia y cómo habían tenido muchos problemas para quedarse embarazadas...parecía que con endometriosis más nos valía directamente recurrir a un tratamiento de fertilidad...no entendía nada, nadie me había hablado de esto...al final iba a tener razón el ginecólogo insensible?...no podía más que llorar...

No levanté cabeza durante días. Hablando con mi madre me convenció para que pidiera hora con algún especialista, alguien que aclarara mis dudas y me explicara detalladamente mi situación y las posibilidades reales de conseguir un embarazo de forma natural. Un par de semanas más tarde me encontraba en el despacho de una especialista en fertilidad.

Tras explicarle mi caso y revisar mi historial, me mandó una analítica de la hormona antimulleriana (indicadora de la reserva ovárica) y otra hormonal a realizar el tercer día del ciclo. Me indicó que les llamara cuando me viniera la regla para programar la analítica.

Únicamente pude hacerme la antimulleriana (por cierto, mi reserva ovárica era correcta), ya que la regla no llegó a aparecer...sin saberlo resulta que ya estaba embarazada. Tantos nervios y tantas lágrimas para nada.

El resto fue coser y cantar. Como os he dicho tuve un embarazo maravilloso, apenas sin molestias (más allá de las típicas). Y al final, el mejor de los regalos, mi niña preciosa, que llegó un 19 de diciembre para alegrarnos y cambiarnos la vida para siempre.

Para acabar por hoy, solo quería deciros por si algún día llegara hasta aquí alguien en mi misma situación, que sepa que la endometriosis no es sinónimo de infertilidad. Por culpa de un médico maleducado e insensible y por el alarmismo de un documental, pasé unas semanas de auténtico infierno. Ahora lo pienso y me parece que soy una exagerada, pero en ese momento lo veía todo negro.


lunes, 14 de diciembre de 2015

LA CUQUI

El próximo sábado es el cumpleaños de la cuqui. Dos años, se nos hace mayor. Es increíble lo rápido que ha pasado el tiempo. La miro y parece que fue ayer cuando vi el positivo en el test de embarazo. Es curioso como varía la percepción del tiempo en función de los acontecimientos que vivimos o esperamos.

Hoy me gustaría contaros un poco más sobre ella, explicaros cómo es, su carácter y su forma de ser que nos tiene totalmente enamorados.

La cuqui es un pequeño diablillo rubio, con el pelo rizado y unos ojos azul-grisáceos impresionantes que llaman la atención de todo el mundo. Desde luego que no los ha sacado de sus padres, aunque sí que es cierto que ambos, cuquipapá y yo, tenemos antecedentes en nuestras respectivas familias de ojos grises.

Destaca por su alegría. Se despierta cada día con una sonrisa. Cuando por las mañanas se despierta y me llama mamaaaaaaa!!! Al entrar a su cuarto y verla depie en su cuna siempre con esa sonrisa de oreja a oreja...se me para el corazón. Os aseguro que no hay forma mejor de comenzar el día.
Pero no solo nos sonríe a nosotros, siempre tiene una sonrisa para todo el mundo. Cuando vamos por la calle, le encanta ir saludando desde su carrito...hoaaaaaaa (=hola), hoaaaaaa, hoaaaaaa.... 

Hay tres cosas que le gustan por encima de todo:

1) Correr. Ella en lugar de jugar con sus juguetes corre. Así, sin más. De una punta a otra de la casa. De hecho, se que cuesta creerlo, pero aprendió a correr antes que a caminar. Ni os imagináis la de moratones y chichones que ha acarreado su manía de ir corriendo a todos lados. Afortunadamente ya con casi dos años ha mejorado mucho su técnica y las caídas se han reducido notablemente, y aunque ya ha aprendido a caminar despacio, ella continúa prefiriendo ir corriendo a todas partes...será que tiene prisa!

2) Globos. O como diría ella, oooobo. Le encantan, de todas las formas y colores. Desde bien pequeña le llamaban mucho la atención. Nuestra casa está continuamente llena de globos...parece un chiquipark. Con los globos jugamos a pasárnoslos, los chutamos, dibujamos caras en ellos...con ellos tenemos todo un abanico de posibilidades de diversión asegurada.

3) Palitos. En su lenguaje, iiito. Me refiero a los típicos palitos de pan tostado. La vuelven loca. Es palitoadicta. Los utilizamos básicamente para mantenerla tranquila cuando necesitamos que vaya sentadita en su carro (cada vez nos cuesta más, ella prefiere caminar...o mejor dicho correr). Pero hay que tener mucho cuidado eh? que es capaz de comerse una bolsa entera de palitos antes de que nos demos cuenta!

Podría hablaros de ella sin parar....pero no me quiero hacer pesada! Esta semana tenemos trabajo, hay una gran fiesta que preparar, la ocasión lo merece!

domingo, 13 de diciembre de 2015

NUEVO CICLO - CUARTO INTENTO

Pues sí...tras la bajada de hace unos días, la temperatura continuó en caída libre hasta ayer, cuando por fin hizo su aparición la regla. No me lo he tomado mal, la esperaba. Por lo menos este ciclo junto con el anterior me han servido para determinar con exactitud la duración de mis fases lúteas, que es de 12 días.

La llegada de la regla es una especie de liberación. Aunque pueda parecer contradictorio...lo que peor llevo es la incertidumbre de los días previos. Ayer comienzó un nuevo ciclo y con él una nueva oportunidad para conseguir ese embarazo tan y tan deseado.

Aunque tengo la firme determinación de tomármelo con más calma este mes, eso no quita que yo vaya a poner TODO de mi parte para ver si esta vez es la definitiva.

Estas son las "ayudas" que pienso utilizar:

1) ÁCIDO FÓLICO:
Lo tomo desde agosto, cuando decidimos comenzar la búsqueda. Yo tomo Yodocefol, ya que es el que me recomendó la ginecóloga en el embarazo de la cuqui, pero hay multitud de marcas.

Está comprobado que una ingesta de 400 microgramos (0,4 miligramos) diarios antes de la concepción reduce hasta en un 70% el riesgo de que el bebé nazca con defectos graves del tubo neuronal. Dado que la formación del tubo neuronal tiene lugar durante los primeros días tras la fecundación, es muy importante haberlo estado tomando desde antes para que el cuerpo tenga reservas suficientes. Así que si estáis buscando quedaros embarazadas y no lo hacéis ya, os recomiendo que comencéis cuanto antes a tomarlo.

2) TEST DE OVULACIÓN:
El ciclo pasado no los utilicé porque me daba la sensación de que me estresaban demasiado, pero me he dado cuenta que me estreso todavía más si no sé con certeza cuándo voy a ovular. Así que este mes he decidido volver a usarlos pero con un poco más de cabeza...

Teniendo en cuenta que suelo ovular entre los días 19 a 22 del ciclo, comenzaré a hacerlos el día 16 y no el 9 como hasta ahora...

3) TEMPERATURA BASAL:
Como me gusta decir, "la tempe nunga engaña". Me ha ayudado muchísimo a conocer bien mis ciclos y os recomiendo al 100% que lo probéis. No hace falta más que tener un termómetro en la mesilla de noche y recordar tomarse la temperatura nada más abrir los ojos por la mañana.

En los próximos días dedicaré un post a este tema porque me parece muy muy interesante.

4) AGNUS CASTUS:
También conocido como Sauzgatillo. Ayuda a regularizar las hormonas que intervienen en el sistema reproductor femenino y por lo tanto a regularizar los ciclos y a la fertilidad femenina. También alivia la ansiedad y el síndrome pre-menstrual.

A parte de todo esto, intentaré aplicarme altas dosis de calma y tranquilidad para tomármelo con más filosofía este mes. Afortunadamente con las Fiestas Navideñas de por medio estaré más entretenida no? Sea como sea, el próximo 13 de enero saldré de dudas!

viernes, 11 de diciembre de 2015

LA ENDOMETRIOSIS Y YO

Os voy a contar algo más sobre mi. Tengo endometriosis.

Si alguien por ahí no sabe en qué consiste (como fue mi caso en el momento en que me dieron el diagnóstico) aquí os dejo una breve descripción sacada de la página www.endometriosisweb.com.

"Se produce cuando el endometrio no es expulsado del todo y queda fuera del útero (principalmente adhiriéndose a las trompas y los ovarios) este tejido sigue reaccionando a los cambios hormonales que se producen en cada ciclo, provocando una hinchazón en los órganos donde se sitúa. Todo este proceso conlleva un sangrado interno, la descomposición del tejido y la inflamación de los órganos afectados desembocando en fuertes dolores, problemas intestinales, adherencias e infertilidad" 

Así viéndolo escrito asusta no?

En mi caso el diagnóstico vino a raíz de varios episodios de dolor muy intenso en la zona del bajo vientre. Tras realizar algunas pruebas descubrimos de dónde venía el problema...en mi ovario izquierdo se había instalado un quiste del tamaño de un huevo de avestruz!

La ginecóloga me explicó que se trataba de un endometrioma o "quiste de chocolate", que al parecer es exclusivo de esta enfermedad. Dado el tamaño del quiste me programó enseguida la operación y en mayo de 2011, mediante laparoscopia, extirpó el quiste así como múltiples adherencias que tenía repartidas por toda la zona.

A partir de entonces comencé a tomar anticonceptivos, ya que al parecer es lo único indicado para tratar de impedir el avance de la enfermedad, y la verdad es que tras la operación y tomando la píldora los dolores cesaron de golpe.

La endometriosis es una de las principales causas de infertilidad femenina, y me siento en ese sentido muy afortunada, ya que en mi caso no tuve problemas para quedarme embarazada de la cuqui. El embarazo llegó en el segundo intento y transcurrió sin sobresaltos. Imagino que influyó el hecho de que tras la operación me dejaron bien "limpia", quizás si no me hubieran operado la historia hubiera sido bien distinta...

Suelen decir que el embarazo mejora los síntomas de la enfermedad y doy fe de que así es! Tras dar a luz y dado que estuve dando el pecho durante 9 meses, decidí dejar a un lado los anticonceptivos (incompatibles con la lactancia materna). Cuando dejé de dar el pecho y regresó la regla, al ver que los síntomas habían mejorado muchísimo (no tenía apenas molestias) decidí, tras consultarlo con la ginecóloga, no retomar los anticonceptivos...y ese fue mi gran error.

En una revisión rutinaria el pasado mes de junio, me detectaron un nuevo endometrioma en el ovario izquierdo. Según me dijo la ginecóloga, por el tamaño del quiste, estaba en el límite de lo que ella considera operable o no, así que cuando le comenté que nos estábamos planteando buscar un nuevo embarazo me animó a hacerlo. Y en esas estamos.

En enero tengo una nueva revisión para ver cómo va de tamaño. Sinceramente siempre pensé que para entonces ya estaría embarazada y no sería necesario, pero ya veo que no va a ser así...la cosa se está alargando y solo espero que la endometriosis no me de guerra esta vez...




jueves, 10 de diciembre de 2015

LA GUARDERÍA...NIDO DE VIRUS?

La cuqui tiene otitis. Ayer por la tarde, tras estar jugueteando y trasteando por casa como siempre comencé a notarla extraña. Ella es puro nervio, así que cuando se encuentra mal se le nota enseguida. Tras ponerle el termómetro vi la causa...38,8 de fiebre. Un supositorio de paracetamol y a la cama.

Al día siguiente (osea hoy) de nuevo puesta en marcha de la maquinaria de emergencia para estos casos, que básicamente consiste en avisar a mi madre para que deje todo lo que tenía previsto y llevarle a la niña. Ella es quien se ha encargado de llevarla al pediatra y nos ha comunicado el diagnóstico.

El tema no sería digno de mención si no fuera porque en las últimas tres semanas hemos pasado por una laringitis, una conjuntivitis y una bronquitis. Menuda racha llevamos...y eso que nos las prometíamos muy felices cuando comenzó la guardería en septiembre y pasó los dos primeros meses como un roble! Pues ha sido llegar el frío y comenzar a coleccionar virus. Cualquier cosa que termine en -itis se la trae a casa. Y ahí andamos cuquipapá y una servidora haciendo encaje de bolillos para combinarnos.

Cuando he llamado a la guardería para avisar de que no iría, me han confirmado que estaban "en cuadro". Por lo visto están faltando muchos niños, sobretodo imperan las bronquitis y la gastroenteritis (ahí he pensado...mira! ese no lo tenemos todavía...todo se andará...).

Estoy comenzando a ver la guardería como un nido de virus y bacterias, un lugar peligroso donde mi cuqui no está a salvo, y sinceramente, empiezo a experimentar cierto malestar conmigo misma...me siento mal por hacerla pasar por todo esto. Todo el mundo me dice que es normal, que cuando empiezan la guardería cogen de todo, que se fortalecerá...pero que queréis que os diga...no lo veo del todo claro...

Hablando de este tema con mi madre, me confirmaba que cuando mis hermanos y yo éramos pequeños esto no pasaba. Por supuesto que de vez en cuando enfermábamos...pero desde luego no era este no parar! Imagino que estará ligado al hecho de que en aquella época la mujer no estaba tan incorporada al mercado laboral como ahora, y cuando el niño enfermaba se quedaba en casa. 
Está claro que la situación ahora es muy distinta...imagino que demasiado a menudo ante unas décimas de fiebre se opta por enchufar el Dalsy al niño y enviarlo a la guardería con la esperanza de que no te llamen a media mañana para ir a buscarle, con la consiguiente diseminación del virus de turno...y ojo! que aunque no me parezca bien no lo critico eh? Entiendo que no todo el mundo tiene la suerte de poder dejar a sus hij@s con los abuelos.

Mis suegros viven fuera de la ciudad, no excesivamente lejos, pero sí lo suficiente como para que no podamos contar con ellos en estos casos. Por el tipo de trabajo de cuquipapá, si él falta, otro compañer@ tiene que ir a sustituirle, por lo que siempre evitamos esa opción. Por lo tanto, cuando la cuqui no puede ir a la guardería la única opción que nos queda es que se quede con mi madre (lo que ocure el 90% de las veces) o conmigo, con la consiguiente llamada a la oficina informando de que lamentablemente no podré ir a trabajar.

Con todo, considero que somos muy afortunados, ya que mi madre puede hacerse cargo la mayoría de las veces. Teniendo en cuenta que en las últimas tres semanas únicamente ha ido a la guardería 4 o 5 días...cómo lo hubiéramos podido hacer? Cómo lo hacen las familias que no tienen la suerte de tener a alguien que se haga cargo de los peques cuando enferman? 

DE DÓNDE VENIMOS, DÓNDE ESTAMOS?

Comenzaré respondiendo la segunda pregunta...estoy a día 11 de mi fase lútea y ya sin ninguna esperanza para este ciclo...una bajada de la temperatura basal esta mañana me ha puesto sobre aviso de que mi amiga indeseada no tardará en llegar.

Para quién no esté muy puest@ en estos temas, os diré que la fase lútea comprende el período que va desde la ovulación hasta la llegada de la regla, y mediante la medición de la temperatura basal (tomada cada mañana nada más despertar) podemos saber por dónde van a ir los tiros. La temperatura basal se mantiene baja durante la primera parte del ciclo, sube tras la ovulación y vuelve a bajar con la llegada de la menstruación. Si se produce el embarazo, la temperatura no baja, por lo que para las que utilizamos este método, una temperatura que se mantiene elevada más allá de la fecha en la que nos tocaría la regla, es un indicativo de que puede haberse producido el embarazo.

No va a ser ese mi caso este mes...otro intento fallido a la saca, y a por el siguiente ciclo, a ver si el nuevo año nos trae por fin suerte.

Como os adelanté en mi anterior entrada, decidimos comenzar a buscar a finales de agosto y, sorpresa!! acertamos a la primera!! No nos lo podíamos creer! Por desgracia la alegría nos duró bien poco, ya que 5 días más tarde de ver el positivo comencé a manchar...resultó ser un aborto bioquímico. Fue un chasco bastante grande, es increíble la de ilusiones que nos podemos hacer en tan solo unos días...si hasta estábamos ya planeando cómo organizaríamos las habitaciones!!

Poco a poco la decepción dio paso a la esperanza, si lo habíamos conseguido tan pronto seguro que no tardaríamos en volverlo a conseguir. Yo estaba convencida de que me quedaría embarazada al siguiente ciclo...pero no fue así, y por lo visto en este tercer intento tampoco va a ser.

Hoy ha sido un día de bajón...sé que tres intentos no son nada (y más teniendo en cuenta que conseguimos el embarazo en uno de ellos, aunque no llegara a buen puerto) pero os voy a confesar uno de mis peores defectos...soy una "ansias" y lo que quiero he de conseguirlo YA. Algo me dice que esta búsqueda va a ser toda una cura para mi impaciencia, espero equivocarme...






miércoles, 9 de diciembre de 2015

ARRANCANDO...

Ayer fue mi cumpleaños, cumplí 34 largos y provechosos años. No me ha ido mal y no puedo quejarme. A los 26 recién cumplidos, tras besar demasiadas algunas ranas, conocí al que a día de hoy es mi marido, mi media naranja y sin duda alguna el  hombre de mi vida. 

Al poco llegó a nuestras vidas nuestro gordito, un bulldog francés testarudo y bonachón al que queremos como si de un hijo se tratara. Un tiempo después nos casamos, y dos años más tarde venía al mundo nuestra hija, alias la cuqui, que ya se que suena cursi a más no poder...pero es que de verdad os digo que ella es así, cuqui total!!

Recuerdo su embarazo como la época más emocionante de mi vida, jamás olvidaré las 39 semanas que pasé con ella en mi vientre, sintiéndola crecer…con ella conocí lo que es el AMOR en mayúsculas. El AMOR sin límites e incondicional. 
Ella es el motor de nuestra vida, la que nos hace sonreír cien veces cada día y saca lo mejor de cada uno de nosotros, incluso en los peores momentos…las palabras se quedan cortas para describir lo que significó su llegada a nuestras vidas, y lo felices que nos hace todos y cada uno de los días que compartimos con ella. 

Y por fin, a punto de celebrar el segundo cumpleaños de la peque, nos hemos decidido a repetir experiencia y a ampliar la familia. Bueno, de hecho lo decidimos en agosto, y hasta la fecha no ha habido suerte….y de eso trata principalmente este blog, de la búsqueda de mi segundo embarazo, de mis vivencias como mamá primeriza con ganas de dejar de serlo, de la maternidad, la familia y, en general de todo aquello que se me pase por la cabeza... Bueno, sin más, empezamos…me acompañas?