miércoles, 26 de octubre de 2016

MALDITO OCTUBRE

Se acabó el sueño. Qué poquito ha durado.

El lunes por la tarde repetimos la beta. Había subido pero poco. En las primeras semanas de embarazo la beta debe duplicarse cada 48-72 horas y la mía era de 811...cuando el sábado era de 721. Al abrir el sobre con el resultado se nos cayó el mundo al suelo. 

Luego la ecografía. Podía apreciarse perfectamente el saco gestacional de 5 mm bien implantado en el útero. Había crecido respecto al sábado, cuando medía únicamente 3 mm, aunque no se apreciaba saco vitelino ni embrión.

Con estos datos la ginecóloga decidió repetir beta y ecografía en 48 horas, aunque ya nos avisó de que la cosa no pintaba muy bien. De todos modos, al haber crecido tanto la beta como el saco, todavía teníamos un rayito de esperanza. Como nos dijo, en medicina 1 + 1 no siempre son 2 y existía un porcentaje (en torno al 10%) de embarazos evolutivos en los que la beta no duplicaba siguiendo el patrón habitual.

Así que hoy tocaba repetir el proceso. Esta vez primero ha sido la ecografía. Ahí estaba mi saquito, que había crecido hasta los 6,5 mm. No se apreciaba embrión, aunque nos han dicho que todavía era muy pronto para que se viera. Que el saco continuara creciendo nos ha dado esperanzas, pero se han desvanecido en cuanto nos han dado el resultado de la beta...781. Más baja que 48 horas antes.

Definitivamente este embarazo no va a tirar hacia adelante. Me han dado una semana de plazo para ver si mi cuerpo lo expulsa de forma natural. Si no es así, el próximo miércoles nueva beta y ecografía y ya pensaríamos en un legrado o en un aborto farmacológico.

Y así es como acaba todo. Maldito octubre, que me ha quitado ya dos embarazos

Ahora lo único que espero es que por lo menos lo expulse por mi misma y que termine pronto la pesadilla. Soy incapaz de describir la tristeza que sentimos en estos momentos.

El único consuelo que nos queda es que por lo menos, aunque sea fugazmente, lo hemos conseguido. Tras un año de intentos, este embarazo nos da la esperanza de volver a lograrlo. Aunque eso será más adelante. 

Ahora necesitamos recuperarnos del golpe y sanar las heridas, y eso solo será posible cuando todo esto acabe.





domingo, 23 de octubre de 2016

GESTACIÓN INCIPIENTE vs EMBARAZO ECTÓPICO

Como era imposible que Cuquipapá y yo fuéramos tan afortunados, comienzan los problemas...

Ayer sábado por la tarde comencé a sentir algo de dolor en la zona del bajo vientre. No eran los típicos dolores menstruales que pueden ser tan habituales al inicio del embarazo, más bien eran calambres y localizados principalmente en la zona izquierda. Al principio no le di mayor importancia, pero la molestia fue a más...hasta que llegó un punto en que no podía caminar derecha.

Lógicamente nos asustamos mucho. El ovario izquierdo es mi ovario "malo", donde tengo el endometrioma...así que a las nueve de la noche y tras dejar a la Cuqui con mi madre nos fuimos para urgencias.

De camino al hospital el dolor fue disminuyendo considerablemente hasta que cuando llegamos allí ya prácticamente había desaparecido. Llegué incluso a sentirme una loca paranoica y hasta dudé si había sido una buena idea montar tanto escándalo. Pero claro, una vez allí, lo mejor es que me miraran a ver qué se cocía por ahí dentro...

Enseguida me hicieron desvestirme de cintura para abajo para practicar una ecografía vaginal. La ginecóloga me preguntó la fecha de mi última regla, según la cual estaría embarazada de 5+4 semanas (aunque según mis cálculos estaría de un poquito menos, 5+2). Introdujo el aparato y Cuquipapá y yo contuvimos la respiración. Tras mirar y mirar desde todos los ángulos posibles durante lo que nos pareció una eternidad, por fin nos dijo que ella no veía nada, ni en el útero ni fuera de él. El endometrio engrosado compatible con embarazo pero sin rastro del saco gestacional.

En ese momento entré en pánico...era posible no ver nada a esas alturas? Me contestó que tendríamos que hacer una analítica para determinar el nivel de beta Hcg en sangre, que podía ser que estuviera de menos tiempo del que pensaba. De todos modos, prefirió llamar a dos colegas más para que me valoraran y estar más segura.

Acabé rodeada de 4 ginecólogas rebuscando dentro de mi útero, trompas y ovarios hasta que dos de ellas dijeron creer haber visto lo que podía parecer un pequeño saco. Apenas una manchita negra que aparecía y desaparecía a la mínima que movían ligeramente el ecógrafo. Nos confirmaron que con  la ecografía no podían llegar a ninguna conclusión...no tenían claro que se viera el saco y no aparecían rastros de embarazo ectópico.

Me hicieron la analítica para confirmar el valor de la beta en sangre. En apenas una hora nos dieron el resultado: 721,54 mUI/L. Según sus valores de referencia muy bajo para mis semanas de gestación.

La ginecóloga nos explicó que habían tres opciones:

1.- Que estuviera embarazada de menos semanas. Yo esta opción la descarto, ya que se perfectamente cuándo ovulé.

2.- Que se trate de un embarazo no evolutivo. Es decir, que se esté parando, si es que no lo ha hecho ya.

3.- Que se trate de un embarazo ectópico.

Descartando la primera opción, las otras dos no son muy alentadoras...ahora toca volver mañana, cuando habrán pasado 48 horas para repetir beta y ecografía. Salimos de allí destrozados.

No me puedo creer que después de tanto tiempo, tantas decepciones...esto vaya a acabar así.

Hoy me he repetido un Test de Embarazo, que se ha marcado más que el anterior. Llevo horas y horas enganchada al ordenador revisando cientos de tablas con valores normales de Hcg y en la gran mayoría me encuentro dentro del rango, por el límite bajo eso sí, pero dentro al fin y al cabo.

A ratos soy optimista, y estoy convencida de que todo saldrá bien...y al momento me hundo en un pozo negro y no puedo más que llorar. Solo queda esperar a mañana. Estamos aterrados pero por lo menos saldremos de dudas, la incertidumbre es lo peor.




lunes, 17 de octubre de 2016

MI TERCER EMBARAZO

Mi primer embarazo llegó pronto, sin contratiempos, un embarazo muy bueno y tranquilo que nos trajo lo que más queremos en este mundo, a nuestra Cuqui.

Mi segundo embarazo llegó también muy pronto, aunque con la misma rapidez con la que llegó se esfumó...dejándonos hundidos aunque con la esperanza de que lo volveríamos a conseguir. Si lo habíamos logrado tan rápido en dos ocasiones...por qué no iba a ser así de nuevo?

Y ahora, 13 meses después, por fin llega mi tercer embarazo. Cuando estábamos comenzando a asimilar que nos dirigíamos irremediablemente hacia un tratamiento de fertilidad, después de aceptar que sería complicado lograrlo de manera natural. Cuando ya estábamos visitando clínicas, valorando tratamientos, precios...ahora, cuando menos lo esperábamos, llega.

Porque la vida es así, tiene estas cosas. Meses y meses atenta a los Test de Ovulación, a la semana fértil, a la gráfica de temperatura, haciendo los deberes aplicadamente...y el mes por el que menos hubiera apostado...resulta ser el bueno.

Todavía nos cuesta creérnoslo. Ya no tengo la inocencia que tenía en mis dos primeros embarazos. Ahora soy consciente de que estar embarazada no garantiza que vaya a tener un bebé. Queda mucho camino por recorrer aunque con lo que nos ha costado llegar hasta aquí...ya doy gracias una y mil veces.

Andamos estos días entre la felicidad más absoluta y el miedo más aterrador. No se cuántos Test de Embarazo me habré hecho para confirmar que los niveles de hormona HCG van aumentando como deben.

Hoy sería mi día 18 DPO. La temperatura sigue alta, los primeros síntomas van apareciendo y el Test de Embarazo Clear Blue ha pasado de decir "Embarazada 1-2" a "Embarazada 2-3" así que, en principio, todo parece ir bien.



Por fin me he atrevido a pedir cita con mi ginecóloga para la primera ecografía a las 8 semanas y con la matrona de la Seguridad Social. Recuerdo lo duro que se me hizo tener que cancelarlas tras perder mi segundo embarazo...

Toca esperar a mediados de noviembre. Se hará larga la espera, pero la afrontamos confiados. 

Esta vez ha de salir bien, ha de ser la buena. Han sido muchos meses, muchas decepciones, muchos lloros tras ver aparecer la regla puntual mes tras mes, al conocer embarazos de amigas y conocidas, tensiones con Cuquipapá, discusiones...en fin, desde luego que hay que vivirlo para saber lo que es.

Recuerdo que tras el aborto, Cuquipapá y yo decíamos...."nos da igual lo que tarde en llegar, pero que la próxima vez sea para quedarse". Desde luego que no pensábamos que tardaría tanto pero...tenemos fe en que la larga espera merecerá la pena.


miércoles, 12 de octubre de 2016

Y CUANDO MENOS PIENSAS...SALE EL SOL

Ha pasado tiempo desde mi última publicación. Es fácil imaginar cómo terminó todo....un nuevo batacazo, muy muy fuerte...impotencia, desesperación...sin ganas de hablar y mucho menos escribir sobre el tema...

Cuando conseguimos reponernos un poco, pedimos cita en una clínica de fertlidad, a la que fuimos hace dos semanas. Este viernes teníamos cita en otra clínica, pero me parece que la voy a tener que anular porque....cuando menos piensas....sale el sol.